Sony A7R IV la cámara perfecta para dar el salto de aficionado a profesional
La Sony A7R IV es la cuarta edición de la cámara sin espejo de alta resolución, y esta vez Sony ha superado a toda la competencia y ha sacado una cámara que produce fotos de 61 megapíxeles a partir de un sensor full frame.
Hasta ahora, las cámaras de la misma categoría habían ofrecido resoluciones de hasta 45 MP (y más). Algunos ejemplos son la Nikon D850, la Nikon Z7, la Panasonic S1R, todas ellas cámaras que sirven para el mismo propósito: procesar imágenes de alta resolución para impresiones de gran formato y producciones profesionales.
Así que Sony actualiza la A7R III (que ya era una de las mejores de su clase) y lo hace muy bien. Añade esos 15 MP adicionales en el sensor de fotograma completo y mejora el sistema de AF hasta el nivel de los últimos modelos. La Sony a6400 fue la primera en introducir las opciones de AF de seguimiento en tiempo real y AF de ojo en tiempo real, ahora presentes en la Sony A7R IV.
El cuerpo de la cámara ha sido modificado, no mucho, pero lo suficiente como para notar la diferencia. Al tacto, la A7R IV es más agradable de usar, los botones tienen una respuesta más incisiva y la calidad de los controles ha mejorado mucho.
También nos complace ver que, entre las especificaciones técnicas, ambas ranuras de memoria aceptan ahora tarjetas SD de alta velocidad.
Tampoco hay que subestimar la presencia de un visor electrónico de muy alta resolución, en respuesta a los de las cámaras sin espejo Nikon Z y Panasonic S.
La A7R IV es la cámara perfecta para los fotógrafos que realizan retratos, paisajes, catálogos y fotografía arquitectónica, así como para capturar importantes obras de arte con la máxima calidad y conservando el máximo detalle posible.
Su único problema será el manejo de archivos grandes, para el resto tendrá una cámara con capacidades excepcionales.
Para el vídeo, no es nuestra primera opción, ni quiere serlo. La Sony A7R IV está diseñada específicamente para la fotografía, pero si te estás preguntando si puedes grabar imágenes de calidad con esta cámara sin espejo, la respuesta es sí, con algunas pequeñas limitaciones.
Conozcamos ahora todas las características, en esta revisión técnica de la Sony A7R IV.
Diseño y características de la Sony A7R IV
La Sony A7R IV está excelentemente construida, con materiales de primera calidad y muchas opciones de personalización para los botones de control. El cuerpo de la cámara está tropicalizado y puede utilizarse en diversas situaciones, incluso para fotografiar en exteriores con lluvia y humedad.
En comparación con sus rivales más cercanos (Nikon Z7 y Panasonic S1R), la Sony tiene un cuerpo más pequeño y es menos pesada. Esto es un factor positivo para la portabilidad, pero también podría significar menos equilibrio cuando se utilizan teleobjetivos pesados.
Sin embargo, Sony ha rediseñado el agarre, que es más pronunciado en esta versión que en la mark III, y esta diferencia ayuda mucho a mejorar el agarre.
La cámara es compatible con los objetivos de montura E, como el resto de las cámaras sin espejo de Sony.
En la placa superior encontramos el dial de selección de modos, que cuenta con funciones de disparo manual, automático y semiautomático, modo de vídeo, Slow&Quick y tres ranuras de memoria personalizables.
A continuación, dos botones personalizables C1 y C2, que podemos configurar dentro del menú. Luego está el dial multifuncional para el pulgar derecho, y el dial de compensación de la exposición, que ahora cuenta con un botón de bloqueo para evitar su activación accidental.
Como se trata de una cámara profesional, no hay flash incorporado, y hay un accesorio de zapata para un flash externo.
En términos de botones y controles, la Sony A7R IV es ligeramente diferente de otras cámaras de la misma clase. Es más sencilla y esbelta, por ejemplo, no hay una pantalla LCD secundaria para mostrar los ajustes de disparo (la que se encuentra en la placa superior de algunas cámaras SLR de fotograma completo y sin espejo).
También hay menos botones dedicados para seleccionar el balance de blancos y la sensibilidad ISO. Por ejemplo, la Panasonic S1R tiene controles preestablecidos para estas funciones, sin necesidad de ir a buscarlos o leer el manual.
La Sony Alpha A7R IV, en cambio, prefiere ofrecer opciones de personalización, para que cada usuario pueda configurar los botones para sus funciones preferidas. Esto requiere tiempo y paciencia, por lo que lo recomendamos más a quienes quieran personalizar la cámara a su gusto asignando las distintas funciones a los numerosos botones personalizables. Una vez que encuentras tu configuración preferida, la usabilidad es muy buena.
Entre otros controles, la parte trasera ofrece el práctico botón AF-ON, y el joystick de selección del punto AF, para un buen control del modo de selección del punto de enfoque.
Para aquellos que lo deseen, esta cámara es compatible con la empuñadura de batería VG-C4EM de Sony, que no sólo ofrece una considerable ampliación de la duración de la batería, sino que también es conveniente para disparar en vertical con controles totalmente duplicados.
Visor y pantalla
El visor electrónico OLED TruFinder de la Sony A7R IV recibe una buena actualización respecto a la versión anterior, y ahora está a la par, o es superior, a las nuevas cámaras sin espejo de fotograma completo de Nikon y Panasonic. La resolución es de 5,76 millones de puntos, para una imagen realmente nítida.
El brillo es alto, lo que nos permite obtener una visión adecuada de la imagen que se está tomando. La tasa de refresco es de hasta 120/100fps, para que el movimiento sea fluido.
La pantalla sigue siendo la misma que antes, con una resolución de 1,44 m de puntos en un tamaño de 3 pulgadas, y la funcionalidad táctil para el enfoque. En este sentido, las rivales sin espejo Nikon Z7 y Panasonic S1 tienen una ligera ventaja, ya que montan pantallas más grandes (3,2 pulgadas) y definidas.
Para las fotos tomadas desde arriba o desde abajo, la Sony A7R IV ofrece un mecanismo de inclinación de la pantalla que puede inclinarse hacia arriba 107° y hacia abajo 41°.
Calidad de la imagen
La calidad fotográfica es la principal razón por la que estás leyendo esta reseña sobre la Sony A7R IV. Buscas una cámara de alta resolución para hacer fotos profesionales y estás indeciso entre las mejores full frame de la historia.
Así que vayamos al grano. La última cámara de Sony es, hasta la fecha, la mejor cámara de fotograma completo para la fotografía profesional. Merece la pena todo su precio de compra y ofrece una combinación de características nunca vista hasta ahora.
Los principales aspectos que nos gustaría destacar son la presencia de un sensor de 61MP de resolución, nunca antes visto en un full frame, una excepcional reproducción de los detalles, una notable capacidad de captura de luz y un gran rango dinámico.
En una cámara digital, cuanto mayor sea la resolución del sensor, menor será la capacidad de captar la luz y, por tanto, peor será la calidad de la imagen en condiciones de poca luz. Y este es precisamente el reto que ha asumido Sony al crear una cámara de 61 MP.
Tenemos que decir que el resultado es nada menos que extraordinario. Cuando se comprueba el rango dinámico y el nivel de ruido, la A7R IV muestra un ruido digital inexistente hasta ISO400, y luego se vuelve tranquilamente manejable hasta ISO6400. Si superamos este umbral, las fotografías serán apenas utilizables.
Compárala con la Nikon Z7, que tiene un sensor de 45MP, y te darás cuenta de que la A7R IV se sitúa justo un escalón por debajo. Con la Sony ajustada a ISO 12800 tenemos el mismo nivel de ruido que genera la Z7 a ISO 25600.
Se trata de un gran logro de los ingenieros de imagen digital de Sony, que han conseguido implementar una resolución muy alta y una sensibilidad ISO aún competitiva.
En lo que respecta a la saturación del color, los tonos de piel y el balance de blancos automático, puede esperar el mismo rendimiento que las otras cámaras Sony de fotograma completo más recientes. La cámara produce tonos de color naturales y agradables, y con un buen equilibrio.
Por debajo de ISO 320, la tecnología de doble ganancia nos permite conservar más detalle en las altas luces, por lo que podemos jugar con los deslizadores en la postproducción y ajustar la exposición de las fotografías con un amplio rango dinámico. Esto será especialmente útil en la fotografía de paisajes, donde el rango entre las sombras y las luces suele ser muy amplio.
Recuerda que esta cámara ofrece estabilización interna del sensor con la tecnología SteadyShot, que en este caso tiene una compensación de vibraciones de 5,5 paradas. Esto es útil en la fotografía a mano alzada, para elevar un poco los tiempos de exposición y obtener fotos sin desenfoque.
Sin embargo, hay que decir que con un sensor de 61MP, el nivel de detalle es tan alto que será muy fácil ver cualquier imprecisión causada por la mano del fotógrafo. Si nos equivocamos un poco en el punto de enfoque, o elegimos una velocidad de obturación un poco más lenta de lo que debería, lo veremos inmediatamente cuando vayamos a examinar detenidamente los archivos RAW.
Sin embargo, el estabilizador interno es un buen arma para aliviar las imprecisiones. Y también se recomienda comprar objetivos estabilizados para añadir también la estabilización del objetivo.
Como en la versión anterior, y como en otras cámaras recientes, la Sony A7R IV también ofrece la función Pixel Shift, que permite fotografiar objetos estáticos, o escenas sin movimiento, y obtener fotografías de 240 megapíxeles.
Rendimiento del sistema AF
El sistema AF de la Sony A7R IV se ha actualizado y ahora consta de 567 puntos AF de detección de fase y 425 de detección de contraste. La cobertura del cuadro es del 99% en vertical y del 74% en horizontal. También se ha incorporado la nueva tecnología Real Time Tracking AF y Real Time Eye AF.
Hay una mejora notable en el rendimiento con respecto a la Sony A7R III (que ya era sobresaliente en el año de su lanzamiento). La Sony A7R IV es muy fácil de usar, gracias al sistema de AF inteligente consigue enfocar correctamente en cualquier situación, y el usuario casi nunca tiene que intervenir.
Esta nueva tecnología, introducida con la Sony A6400 e implementada posteriormente en todas las nuevas Alfas, permite al usuario concentrarse totalmente en la composición y la exposición de la foto, y desviar completamente la atención del enfoque, del que se encargará el software.
Por supuesto, el usuario puede tomar el control si lo desea, pero creemos que en la mayoría de los casos no es necesario.
¿Cómo funciona en la práctica el AF de seguimiento en tiempo real? Digamos que tenemos dos sujetos dentro de la composición, por ejemplo el novio y la novia.
Si hemos seleccionado el punto AF central antes de hacer la toma, simplemente lo colocamos en la cara de la novia y pulsamos el botón del obturador hasta la mitad (mientras lo mantenemos pulsado). A partir de aquí la cámara seguirá manteniendo enfocado el ojo de la novia, aunque cambiemos la composición continuamente.
Si queremos cambiar de sujeto y enfocar al novio, simplemente quitamos el dedo del obturador, ponemos al novio en el centro del encuadre, volvemos a pulsar hasta la mitad (y mantenemos desde ahí). La cámara se dará cuenta de que ese es el sujeto que quieres seguir y mantendrá el punto de enfoque pegado al ojo del novio.
Si el sujeto se gira, o si se tapa el ojo durante unos instantes, la cámara seguirá manteniendo el punto de enfoque correctamente hasta que el ojo del sujeto vuelva a ser visible.
Hay que probarlo para creerlo, es un método realmente innovador y eficaz. En situaciones en las que no podemos permitirnos fallar el objetivo, Sony va un paso por delante de la competencia.
Modo de disparo continuo
Otro reto que Sony ha conseguido llevar a casa con esta cámara es la implementación de un disparo continuo lo suficientemente rápido para capturar sujetos en movimiento.
En una cámara digital de 61MP, los archivos generados son muy grandes, y si disparamos en RAW de 14 bits (sin comprimir) tendremos fotografías que ocupan bastante memoria digital, lo que ralentiza el rendimiento en velocidad de escritura.
Sony ha conseguido mantener una ráfaga de 10 fps para tomas RAW comprimidas a 12 bits, o fotos JPEG. Si cambiamos a RAW de 14 bits sin comprimir, el disparo continuo cae a 6 fps.
Son números bien aceptables para una cámara de este tipo, ya que todavía nos permiten capturar escenas a gran velocidad si optamos por disminuir un poco la calidad de la imagen.
La elección de un RAW de 12 bits en lugar de uno de 14 bits supone un ligero descenso del rango dinámico y la posible presencia de artefactos como el banding. Estas pequeñas imperfecciones son definitivamente pasables en la mayoría de las situaciones.
Además, las dos ranuras de memoria aceptan tarjetas de alta velocidad, por lo que no hay diferencia en la velocidad de escritura al cambiar de una tarjeta a otra.
Por lo tanto, la Sony A7R IV también pasa la prueba de la fotografía deportiva y de alta velocidad, por lo que se sitúa entre las mejores cámaras para todo tipo de fotografía.
Vídeo
La Sony A7R IV no está diseñada específicamente para el uso híbrido. Si necesitas hacer fotos y vídeos en una proporción similar, te recomendamos más bien un cuerpo de cámara con un sensor de 24 MP como la Sony A7 III.
Todas las buenas características presentes en otras cámaras sin espejo de Sony también están presentes en esta versión, y si queremos capturar vídeo de calidad podemos hacerlo, pero no se puede esperar el mismo rendimiento en condiciones de poca luz que una cámara con un sensor menos resuelto.
La A7R IV permite grabar vídeo 4k en lectura completa del sensor o en recorte. En el primer caso con pixel binning, en el segundo con mejor resolución, pero con un campo de visión estrecho.
La compresión es siempre de 8 bits y el vídeo Full HD permite grabar a cámara lenta hasta 120 fps.
Las cualidades del sistema AF son las mismas tanto para las fotografías como para el vídeo, por lo que puedes aprovechar la tecnología de seguimiento también para grabar vídeos, y el estabilizador interno es estupendo para grabar vídeos a mano.
El cuerpo de la cámara cuenta con una entrada de micrófono y una salida de auriculares, para que puedas añadir audio de calidad y controlar tu grabación.
Conectividad
En el cuerpo de la cámara de la Sony A7R IV encontramos el puerto USB, que también se puede utilizar para transferir las imágenes inmediatamente al PC durante una toma, para obtener una vista previa en pantalla grande al instante.
La gran novedad de esta versión es que también se puede hacer tethering vía wifi, para evitar tener el cable conectado a la cámara y tener libertad para moverse por el estudio fotográfico, o en exteriores. Para utilizar esta función, es necesario utilizar el software Sony Imaging Edge. Nos parece un complemento muy útil para los fotógrafos profesionales.
Como es habitual, encontramos WiFi y Bluetooth, y también NFC para iniciar la conexión colocando el smartphone sobre la cámara.
Autonomía
La Sony A7R IV admite baterías del tipo NP-FZ100, y una carga dura 530 disparos utilizando el visor. Se puede adquirir una empuñadura adicional para duplicar la duración de la batería y tener un mejor agarre para las tomas verticales.
Cámaras rivales
Colaboración pagada
Conclusión
La A7R IV es una prueba más de lo comprometida que está Sony con la innovación tecnológica en la imagen digital. Nos ha aportado muchas innovaciones y ha revolucionado el sector, empujando incluso a la competencia a adaptarse a las nuevas tendencias.
La recomendamos a prácticamente todo el mundo que pueda permitírselo, no sólo a los profesionales que buscan un compañero fiable, sino también a los que se inician en la fotografía profesional.
Es tan fácil de usar que puedes olvidarte de los ajustes del sistema AF y concentrarte sólo en la exposición y la composición.
No hay comentarios
Publicar un comentario
Los datos de tus comentarios están seguros
Responsable: Dania Beatriz Fotografías
Finalidad: Moderar comentarios
Legitimación: Das tu consentimiento
Destinatario: Plataforma de blogger.
Derechos: Tienes derecho a acceder, rectificar y suprimir los datos.