Cómo hacer buenas fotos instantáneas

 

Si hay una pasión que atrapa a mucha gente, esa sin duda alguna es  la fotografía. Unos más unos menos, pero todos apreciamos el momento de hacer una bella foto. Sobre todo durante un viaje. 

Ya sea profesional o aficionado, un viaje tiene de su lado el hecho de que impresiona en la mente un momento particular, un lugar único, gente mágica. ¿Y qué es mejor que tomar una foto?

Cada viaje tiene un montón de recuerdos, cada recuerdo es algo para compartir. Disparo tras disparo, a través de las emociones que nos han tocado, el "arte" de la fotografía sigue algo preciso: hacernos felices.

Y el "cómo" hacerlo es una pregunta objetiva: para algunas personas basta con la cámara del teléfono móvil, otras prefieren la última cámara réflex, y otros prefieren la fotografía analógica y las cámaras instantáneas.

En este post de hoy te hablaré precisamente de esta última , te contaré...

Cómo hacer buenas fotos con una cámara  instantáneas

Antes de pasar a los consejos fotográficos, lo primero es tener una cámara, para eso debes ver las mejores cámaras instantaneas que existen en el mercado cada una para diferentes propuestas y con precios variados.  

¿Recuerdas la vieja y querida Polaroid? 

Se hizo popular en los años 80 antes de la llegada del digital y permite imprimir las fotos inmediatamente después de tomarlas. En la actualidad las cámaras instantáneas han vuelto a reaparecer en el mercado con gran fuerza. Y pienso que sea algo positivo. 

Còmo funciona una cámara instantánea moderna

Algunos modelos son híbridos entre lo digital y la Polaroid, por lo que permiten guardar fotos en tarjetas de memoria e imprimir sólo las más importantes. Otros no guardan nada, la foto se imprime tal como se toma.

Una cámara instantánea utiliza cartuchos de película de emulsión que agrupan los compuestos químicos necesarios para imprimir una foto. La mayoría de las películas incluyen un negativo que captura la imagen y una capa positiva que produce la impresión final. El revelado se produce cuando la foto se toma y sale de la cámara. Luego pasa del blanco al color.

Hoy, sin embargo, los nuevos modelos nos permiten impresiones instantáneas, la imagen se imprime inmediatamente en color.

En ambos casos tienes que cambiar el cartucho de la película cuando terminan. La mayoría de los paquetes incluyen 10 capas o 10 fotos. Podemos encontrar estos paquetes en todos los comercios especializados en fotografía  o simplemente en Internet.

¡No hay nada más fácil que tomar una foto instantánea! Simplemente coloque tu ojo en el visor para obtener una buena toma de lo que quiere capturar y luego presionas el botón. 

Algunos modelos ofrecen algunas funciones de "paisaje" o "retrato" para ajustar mejor la cámara al tipo de foto que quieres. 

Obviamente hay menos opciones que las cámaras digitales, pero eso es parte del atractivo de las cámaras instantáneas: hay que concentrarse, controlar la luz... en resumen, ¡un verdadero arte!

Consejos para hacer buenas fotos instantáneas

Todo lo que necesitas para tomar buenas fotos es buen gusto y un poco de técnica. 

1. La luz adecuada

La fotografía viene de las palabras griegas "escribir con luz". Un fotógrafo experimentado puede evaluar de un vistazo el color, la intensidad y el equilibrio de la luz en la escena antes de disparar. También tienes que vigilarlo todo el tiempo. 

En medio del verano o en la nieve, por ejemplo, evita la luz del mediodía, que es la más intensa y "dura".

Hay que tener cuidado de que la luz sea uniforme y no demasiado fuerte porque el riesgo es un contraste excesivo, con algunas zonas de la imagen demasiado blancas o negras, y sin detalles visibles.

Para evitar el riesgo de tener una fotografía completamente borrosa y oscura, al fotografiar en ambientes poco iluminados es útil utilizar el flash y colocar el sujeto frente a un fondo de color, mientras que si se está al aire libre es necesario que la fuente de luz esté siempre detrás o al lado del fotógrafo.

2. Cada foto es única e irrepetible 

Una de las cosas más bellas de las  cámaras instantáneas  es lo impredecible que son. Cada fotografía tendrá sus propias características, sus propios tonos, sus propias facetas. Puedes intentar capturar el mismo escenario por segunda vez, pero ciertamente nunca será el mismo que el primero porque las condiciones ambientales cambian en un instante.

3. El revelado de la foto no es tan inmediato

Cada vez que se pulsa el botón de la cámara, se desencadenan unas 5.000 reacciones químicas en la película, por lo que transcurrirán unos minutos entre la toma y la aparición de la propia imagen. Las fotos en blanco y negro tardan unos 5-10 minutos en ser visibles, mientras que las fotos en color tardan hasta un cuarto de hora. 

Durante este tiempo la película debe mantenerse caliente y oscura. No tienes que apurarte, esa es la verdadera magia.

4.  No debes agitar la foto 

Agitar la foto después que sale de la cámara, es el principal mito falso que ha acompañado a la fotografía instantánea a lo largo de los años, ¡no hay nada más malo! Mientras se espera el revelado la película debe dejarse quieta, de lo contrario existe el riesgo de que los colores se mezclen y la foto se altere completamente.

5. Recuerda hacer las fotos a una cierta distancia 

Si obtienes fotos borrosas, puede que no se deba a la falta de luz o a un agarre inestable de la cámara.

Cuando se usa una cámara de este tipo, siempre hay que recordar la distancia que hay que mantener con el sujeto.

Las cámaras Instax Mini por ejemplo tienen una distancia focal de 60 mm.

Así que intenta disparar a una distancia mínima de 0,6 m y una distancia máxima de 2,7 m, para conseguir fotos en foco.

NOTA: Si quieres disparar a un selfie, siempre ten en cuenta la distancia mínima de 60 cm.

6. Busca el sujeto adecuado

Este tipo de cámara es muy adecuada para retratos de personas, más que para tomar fotos de paisajes.

Siempre debes tener en cuenta el rango de longitud en el que puedes disparar.

Evita tomar fotos de paisajes o personas distantes, pero enfócate más en los primeros planos, o en los detalles de lugares u objetos.

7. La correcta conservación de las películas es esencial

Cada película instantánea tiene pequeños tanques de color químico en la parte inferior del cuadro. Por esta razón, para asegurar que el rendimiento de la imagen no se vea alterado después de la toma, debe guardar el cartucho en la nevera con la parte delantera hacia arriba cuando no vaya a utilizarlo durante un tiempo.

¿Cuándo usar las cámaras instantáneas?

Si te gusta la fotografía, entonces una cámara instantánea es un dispositivo complementario. No reemplazará a tu cámara digital, que te permite reaccionar más rápido, ser más preciso y saber exactamente qué fotos va a tomar.

Una cámara instantánea será útil para capturar un momento, una foto de grupo única, para completar un álbum o para exponer una foto en su casa. Son muy similares a las cámaras compactas. 

Te permitirá hacer un regalo, durante una boda por ejemplo. Tomar una instantánea, con un estilo un poco vintage - y ofrecerla unos minutos u horas después de que la foto haya sido tomada - ¡excitará a los novios!

A menos que tengas un presupuesto ilimitado y mucha película, no deberías abusar de tu cámara instantánea como lo haces con las cámaras digitales. 

Deberías tomar una o dos fotos en ocasiones importantes, pero serán fotos verdaderamente únicas.  Y su "valor" será cincuenta veces más alto que todas las otras fotos que tomes con tu cámara digital. En realidad son dos técnicas muy diferentes y dos usos muy diferentes.

¿Por qué comprar una cámara instantánea?

Todos los apasionados de la fotografía te dirán que esto es un arte y esto es aún más cierto cuando se trata de fotos instantáneas. No se toman cientos de fotos destinadas a ser seleccionadas, no se llena el ordenador con fotos destinadas a no ser vistas nunca y ese es el poder de la fotografía instantánea.

Cada fotografía es única y te tomas un tiempo antes de pulsar el botón para que sea la mejor posible. Es una buena manera de relajarse, muy diferente del hábito de tomar tantas fotos que ya no sabes dónde encontrarlas y te olvidas de ellas justo después de tomarlas.

Con una Polaroid la foto es eterna. Lo olvidarás - tal vez - por algún tiempo en el fondo de una caja, pero siempre lo encontrarás con gran placer. 

Una foto digital - a menos que seas muy, muy cuidadoso - termina perdiéndose: los discos duro y las tarjetas de memoria se pierden o dejan de funcionar, al igual que tu ordenador que contiene miles de fotos. 

Las  fotos hechas con tu Polaroid, sin embargo, serán visibles en los próximos cincuenta años y tu mismo puede mostrarlas a tus nietos, como - probablemente - tus abuelos y padres han hecho contigo. 

Las fotos instantáneas están hechas para ser compartidas en el mundo real y no en las redes sociales. Es mucho mejor disfrutar de las fotos durante una noche con amigos que pasar una tableta y buscar - innecesariamente - una foto de la que hablabas unos minutos antes. 

Todo esto permite momentos reales de compartir, mucho más reales en un mundo moderno cada vez más digitalizado.

Para concluir

Elegir una Polaroid (u otra cámara instantánea) significa elegir la verdad. No se puede hacer trampa con una cámara instantánea, las fotos reflejarán la realidad y el momento exacto del disparo! ¡Son recuerdos, tangibles y reales, que nos seguirán toda la vida!. Cuéntame en los comentarios sobre tu experiencia haciendo este tipo de fotografías.